El futuro de la conducción deportiva es el nuevo I.D. R, el auto eléctrico de carreras que acaba de presentar Volkswagen. Te invitamos a descubrir todo sobre este novedoso y excepcional auto en el siguiente artículo.
El nuevo I.D. R de Volkswagen es un auto excepcional que rompe todos los tópicos sobre los autos eléctricos. Dispone de un motor de 500 Kw, el equivalente a 680 caballos de potencia, y pesa tan solo 1.100 kilógramos, lo que hace posible que pueda acelerar de 0 a 100 kilómetros por hora en tan solo 2.25 segundos, más rápido que cualquier auto de Fórmula 1 o Fórmula E.
Carrera hacia las nubes
Toda esta tecnología está al servicio de un reto de altura: que el I.D. R supere el record de un auto eléctrico en la llamada “Carrera hacia las nubes”, una carrera de montaña que tiene lugar en Pikes Peak, Colorado. Se trata de una exigente carrera en un camino de 19.983 metros de longitud, con 156 curvas. La salida se ubica a 2.866 metros sobre el nivel del mar y la llegada a 4.301 metros, lo que implica un desnivel de 1.435 metros o, lo que es lo mismo, una pendiente promedio del 7%.
Las lecciones del I.D. R servirán para otros autos eléctricos
“El objetivo de Volkswagen es ser una referencia en autos eléctricos con la familia I.D. y el I.D. R marca el futuro tanto en el deporte del motor como en el auto eléctrico”, ha dicho el doctor Frank Welsch, miembro del Consejo de Volkswagen. “Los autos vendidos al público han aplicado siempre las lecciones aprendidas en los autos de competición. La carrera de Pikes Peak será una auténtica prueba de fuego para el I.D. R y lo que aprendamos lo aplicaremos en el desarrollo de futuros modelos I.D.”.
Cada frenada generará energía en el I.D. R
Una diferencia entre el I.D. R y los futuros autos eléctricos es que los ingenieros no han buscado que el motor permita un alcance máximo. Su objetivo ha sido lograr la máxima potencia posible para poder cumplir con el reto de la carrera de las nubes. En ese sentido, el I.D. R cuenta con un as en la manga para producir energía y no solo consumirla. En cada frenada, el motor eléctrico, que en este caso operaría como un generador, convierte algo de esa energía cinética en electricidad y alimenta las baterías. Alrededor del 20% de la energía que usará el I.D. R en Pikes Peak se generará durante la propia carrera.